2005
Collezione di poesia
pp. 224
€ 14,50
ISBN 9788806178574
Este libro reúne, en un todo orgánico, los poemas que Bevilacqua dedicó a la figura de la madre en lo que el poeta llama un “dúo para solista,” no se detienen ahora, dos años después de la muerte de su madre. Mismo título para esta colección y para el texto narrativo publicado el año pasado, registrando los acontecimientos que han marcado una vida en dos. La condena del poeta, de hecho, es que el final tangible de un ser querido no se rompe, ha estado en un alter ego, la relación de enlace: se puede llevar a una especie de misteriosa resurrección comunicativa.
Las letras escritas en esta dimensión post mortem, en donde el hijo sigue confiandose a la madre para que lo escuche, para que lo proteja, son la iluminación, momentos únicos de significado, con una innovación fuerte y eficaz. Esta colección es, pues, mpas que una adición de narración poética que ha ganado muchos lectores, un ente separado, se podría decir la “madre” y conjunto de la narración.
Desde principios de la adolescencia, el poeta se refleja en la madre, y se dirige, mediante la sustitución de las líneas de comunicación de una rama secreta y silenciosa, al diálogo que “habla”, y que a menudo hace imposible una maldad objetiva: por ejemplo, la tenaz soledad con la que la madre defendió la vida de su hijo, su internamiento en una depresión clínica severa. Sin embargo, la colección regresa a una naturalidad irónica y felíz, como en las secciones “Tango” y “El viaje a París”, expresando la autenticidad el encanto de un fuerte lazo de sangre.
Las letras escritas en esta dimensión post mortem, en donde el hijo sigue confiandose a la madre para que lo escuche, para que lo proteja, son la iluminación, momentos únicos de significado, con una innovación fuerte y eficaz. Esta colección es, pues, mpas que una adición de narración poética que ha ganado muchos lectores, un ente separado, se podría decir la “madre” y conjunto de la narración.
Desde principios de la adolescencia, el poeta se refleja en la madre, y se dirige, mediante la sustitución de las líneas de comunicación de una rama secreta y silenciosa, al diálogo que “habla”, y que a menudo hace imposible una maldad objetiva: por ejemplo, la tenaz soledad con la que la madre defendió la vida de su hijo, su internamiento en una depresión clínica severa. Sin embargo, la colección regresa a una naturalidad irónica y felíz, como en las secciones “Tango” y “El viaje a París”, expresando la autenticidad el encanto de un fuerte lazo de sangre.
Librería del balcón 